En Semillistas, nuestras manos están listas, las semillas preparadas, y el entusiasmo intacto. Sin embargo, la naturaleza nos recuerda que el tiempo de sembrar también depende de ella.
Hace unos meses, en octubre y noviembre, Sierra los Guájares recibió más de 200 litros de lluvia. Era la oportunidad perfecta para sembrar, pero en ese entonces no teniamos los recursos para ello. Ahora que tenemos todo preparado, el panorama ha cambiado: aun queda suficiente humedad en el suelo profundo, pero la capa superficial está demasiado seca para sembrar. Solo necesitamos una pequeña lluvia de unos 30 litros para comenzar.
En Sierra Lújar, la situación es diferente. Aunque las lluvias han sido más continuas, no han llegado a profundidad. Aquí esperamos lluvias más intensas que permitan a las bellotas germinar y desarrollar raíces profundas.
Aunque estas condiciones retrasan nuestros planes, no nos desanimamos. Sabemos que trabajar con la naturaleza implica paciencia y adaptabilidad. Seguimos aprendiendo, ajustando nuestras estrategias y, sobre todo, cuidando cada detalle para cuando llegue el momento.
Mientras tanto, agradecemos a todas las personas que confían en nuestro trabajo y nos apoyan. Prometemos seguir informándoles sobre los avances, y en cuanto la lluvia llegue, estaremos ahí, sembrando esperanza y futuro.
¡Sigamos trabajando juntos por bosques más verdes y un planeta mas amable!